Como personas, nuestro cabello es de gran importancia para nosotros. Tener un cabello sano y bello nos ayuda a sentirnos mejor, a tener un autoestima más alto, y claro, los cumplidos sobre lo lindo que lo tenemos siempre vienen bien. Sin embargo, hay algunas patologías que afectan nuestro cabello, y que pueden afectar nuestras vidas también. Así que te preguntamos, ¿llevas una vida atareada y llena de estrés? ¿Se te cae mucho el pelo en situaciones de mucho estrés, nervios o ansiedad? ¿Tienes algunas zonas calvas en la cabeza y no sabes por qué te salen? Si tus respuestas a estas preguntas son afirmativas, puede que sufras de alopecia nerviosa.
Ahora estarás preguntándote, ¿qué es la alopecia nerviosa? En este artículo te ayudaremos a entender qué es la alopecia nerviosa, las razones por las que sucede, y cómo tratarla.
Qué es la alopecia nerviosa
La alopecia nerviosa es una patología que consiste en la caída del cabello que puede darse en situaciones de estrés y ansiedad. Puede afectar hasta un 70% de la totalidad de los folículos del cuero cabelludo y hacer que estos se caigan. Además, es posible que el pelo esté sano hasta el momento en el que comienza a caerse, o bien que, por culpa de la patología, empeoren problemas de caída que ya existían anteriormente.
Lo que sucede con la alopecia nerviosa es que, como respuesta al estrés, el organismo genera una cantidad mayor de la hormona cortisol. En cantidades elevadas, el cortisol afecta al funcionamiento normal del organismo, y entre sus consecuencias está el malestar físico y mental. Entre todo, también afecta al cabello. Demasiado cortisol provoca que la circulación de sangre se ralentice e impide la absorción de agua y nutrientes por el cabello. Lo que significa esto es que el funcionamiento normal de los folículos pilosos se ve afectado, y el pelo se debilita y se cae.
Hay diferentes maneras en las cuales el estrés provoca la caída del cabello. Primero, el efluvio telógeno, que consiste en la alteración del ciclo de crecimiento del pelo y que produce una caída del cabello. El cabello deja de crecer habitualmente, se va debilitando, y finalmente de desprende. Segundo, está la alopecia areata, que consiste en la caída repentina de mechones de pelo en determinados puntos de la cabeza. Tercero, la tricotilomanía, que se debe a un trastorno obsesivo compulsivo que lleva a la persona a arrancarse el pelo, incluso inconscientemente. Estas diferentes categorías pueden ser confusas.
Además, debemos mencionar que existen diversos tipos de alopecia que podrían confundirse con la alopecia nerviosa, entre ellos, la alopecia androgénica o androgenética. No obstante, existen diferencias que permiten distinguir entre los tipos de alopecia. Por ejemplo, a diferencia de la alopecia androgenética – que consiste en que el cabello se debilita a lo largo del tiempo – cuando el pelo se cae por alopecia nerviosa lo hace de una manera bastante brusca y repentina, concentrada en un momento del tiempo concreto que corresponde a una situación de nervios, estrés o ansiedad.
Como seres humanos propensos a estresarnos, cualquiera de nosotros puede caer víctima de esta afección en cualquier momento de su vida.
Cómo ayudar a tratarla
El método principal para tratar la alopecia es eliminar la causa del estrés o la ansiedad que se está padeciendo. Cuando el momento de estrés o de nervios termina, la patología termina también. Por esto, el mejor tratamiento es psicoterapéutico, y sería aconsejable acudir a un profesional, para que te ayude a recobrar la calma y conseguir las herramientas necesarias para arreglar la situación.
Otra cosa que ayuda con el tratamiento de la alopecia nerviosa es recuperar la normalidad en tu vida, y crear hábitos que ayuden a tu salud física y mental. Por ejemplo, hacer algún tipo de ejercicio físico te ayuda a segregar endorfinas, hormonas que ayudan a mejorar el estado anímico y a sentirte más relajado. Otra cosa que puedes hacer, es procurar llevar una buena alimentación, ya que puede ayudar a disminuir el efecto de estrés en el pelo. Hay que recordar que una mala nutrición debilita el cabello y lo hace más propenso a caer.
En el caso de que tu alopecia nerviosa sea muy notable, siempre puedes acudir a un especialista. Existen métodos, pautas y técnicas diversas que ayudan con la recuperación del pelo, y un especialista podrá decirte qué debes hacer. Entre los tratamientos para mejorar la alopecia nerviosa están Minoxidil, Finasteride y Terapia PRP.
¿El pelo crece después de la alopecia nerviosa?
Después de hablar tanto sobre la alopecia nerviosa, seguro estarás preguntándote, ¿el pelo crece después de haber padecido alopecia nerviosa? La respuesta es sí. La caída de pelo se produce de forma temporal, y aunque puede ser brusca y pronunciada – en algunos casos se puede perder casi todo el cabello – una vez superada la situación de estrés, nervios y ansiedad, el cabello volverá a crecer.
Sin embargo, puede ser que el cabello no crezca con las mismas características que tenía antes, y cabe mencionar que el tiempo que se padezca la alopecia dependerá de la duración del cuadro de estrés o de ansiedad. Además, es importante que consultes con un especialista, porque es posible que se pueda convertir en un problema crónico si el estrés no disminuye. Por eso, es de máxima importancia que trates de mantener una vida con la menor cantidad de estrés posible, y que encuentres formas de relajarte cuando lo necesites.
En Rebecana te ayudamos con eso. Estas siempre bienvenido cuando quieras tomarte un tiempo para ti mismo, para relajarte, y para evitar y disminuir el estrés en tu vida.
