Beneficios de la menta

Últimamente, la menta, una planta originaria del Mediterráneo, ha llegado a todo el mundo.  Esto ha permitido que todas las culturas tengan la oportunidad de aprovechar sus beneficios. Con más de dos docenas de especies de menta diferentes, este tipo de planta enriquece nuestra salud, tanto física como mental, y por eso se utiliza tanto. Por ejemplo, la encontramos en millones de recetas y es un ingrediente muy útil a la hora de hacernos un té. Además, la menta ha formado parte de estudios tecnológicos relacionados con la belleza en los últimos años. En este artículo veremos cómo la menta nos ayuda exactamente y procuraremos darte tips para utilizarla.

Primero, vemos que existen varios medicamentos de mentol. Existen pastillas para la tos a base de menta ya que este ingrediente alivia el dolor de garganta y ayuda a suprimir la tos persistente. La menta también es un homeopático popular que reduce la congestión de los senos paranasales y, al estar cargada de vitamina A, la menta también apoya una visión saludable. Asimismo, también podemos utilizar la menta como antiparasitario, ya que las hojas tienen propiedades antisépticas y estimulantes.

El mentol también se utiliza en medicinas para desórdenes digestivos ya que, cuando la menta ingresa a nuestro cuerpo, activa ciertas enzimas digestivas que nos ayudan a procesar la grasa y transformarla en energía. Esto no solo ayuda en la digestión, sino que hay ciertos estudios que sugieren que ayuda a regular y a perder peso. Finalmente, la menta también es una fuente de antioxidantes. Por tanto, vemos que la menta es un ingrediente extremadamente beneficioso que se encuentra en muchos lugares de nuestro botiquín.

Segundo, gracias a su versatilidad, la menta también nos ayuda a mantener nuestra higiene general. El ejemplo más claro está en la pasta de dientes que utilizamos a diario o en los chicles que masticamos de vez en cuando. Este ingrediente se usa en estos productos ya que la menta es un poderoso luchador contra el mal aliento. De la misma manera, encontramos menta en ciertos desodorantes porque esta planta ayuda con el mal olor corporal y nos permite conseguir un aroma corporal agradable y fresco.

Asimismo, también hay ciertos productos cosméticos corporales y faciales que incluyen menta, ya que es un antiséptico que ayuda a prevenir el crecimiento de bacterias dañinas. A la hora de formular cosméticos que preserven la integridad de la piel y el cabello ante procesos oxidativos, la menta tiene un efecto refrescante y aromático, además de proporcionarnos una acción purificante. Por ejemplo, las cremas corporales a base de menta proporcionan una relajación corporal profunda y ayudan a la desinflamación muscular focalizada. Del mismo modo, los masajes corporales con aceite de menta son desinflamantes y luchan contra el estrés, la fatiga y los daños musculares.

Por tanto, las aplicaciones de la menta en la cosmética son muy variadas. Viene incluida en muchas cremas para erupciones o picazones ya que estas hojas ayudan a calmar la agravación y a reducir la infección, también en lociones para activar la circulación. En suma, podemos decir que la pequeña hoja de la menta puede ayudarnos a mantener nuestra higiene general de una manera maravillosa, ya que nos protege de los daños oxidativos y evita el envejecimiento cutáneo prematuro.

Por último, la menta beneficia nuestra mente. Su aroma se ha relacionado con mejorar la claridad mental y aliviar el estrés, por lo que es un ingrediente que se utiliza mucho en aromaterapia o en ungüentos utilizados a la hora de relajarnos. Por lo tanto, hemos visto que la menta tiene muchísimas propiedades beneficiosas y la mejor parte es que es fácil de cultivar y de incluir en cualquier parte de nuestra dieta o rutina. Podemos procurar buscar productos que incluyan menta, como cremas hidratantes o limpiadores faciales, pero también podemos incluir un poco en nuestro té, en la limonada, en platos dulces o en platos salados.

En Rebecana, te daremos una idea para una receta con menta que te ayudará a agarrarle el gusto a este superalimento y que además te permitirá recibir todos los beneficios que la menta tiene. Para hacer esta receta, lo que haremos es mezclar el tipo de lechuga de tu elección con aceite de oliva, vinagre balsámico, nueces, fresas, queso gorgonzola y, claro, menta. Esta mezcla de sabores te encantará y la mejor parte es que podrás recibir todos los beneficios de esta planta singular en un solo bocado.