Quizás hayas escuchado mucho sobre el laminado de cejas, pero ¿qué es realmente? La laminación de cejas es un procedimiento que se ha vuelto viral. Especialmente entre aquellos que quieren conseguir cejas perfectas, como si estuvieran maquilladas. Esta nueva alternativa sirve para conseguir cejas gruesas y pobladas. ¡Como las de las famosas! Porque todas sabemos que no basta con dejarlas crecer para conseguir esos resultados. Si quieres saber más sobre lo que es el laminado de cejas, hoy te compartiremos algunos mitos y realidades. ¡Sigue leyendo!
Primero, ¿en qué consiste el laminado de cejas?
El proceso comienza con una limpieza de nuestras cejas con agua micelar o un tónico. Después de eso, cepillamos las cejas con un producto reblandecedor de vello. Esto hace que nuestras cejas sean más manejables. De esta forma, podremos definir la forma que queremos que tengan nuestras cejas de una manera más fácil. Es aquí cuando fijamos la forma que queremos que tengan las cejas. Esta forma permanecerá hasta la próxima sesión de laminado.
A continuación, el pelo de la ceja se alisa químicamente para sellar la forma deseada. Esto sirve incluso en nuestros vellos más desobedientes. Después, la experta le aplicará un producto hidratante y nutritivo a nuestras cejas. De esta forma, nos aseguraremos de cuidar el vello en todo momento. Además, es en este instante cuando puedes pedir un tinte de cejas o depilación. En total, el proceso puede durar más o menos una hora, dependiendo de tus cejas y tus necesidades.
Para seguir aprendiendo sobre el laminado, te compartiremos algunos mitos y realidades.
«El laminado de cejas es lo mismo que el microblading»
Este es un mito. Es común que nos equivoquemos cuando hablamos de estos procedimientos. Al final, los dos tienen como propósito dejar a nuestras cejas luciendo increíbles. Sin embargo, el laminado de cejas no es lo mismo que el microblading. La principal diferencia entre los dos es que la laminación no es un tratamiento invasivo. Es decir, solo se trabaja a nivel del pelo de la ceja. El laminado es una nueva alternativa, que se inspira en el lifting de pestañas. En cambio, el microblading implica microcortes a nivel de la epidermis, por lo que sí es invasivo. Se hacen microcortes porque es así como se introduce el pigmento. Por tanto, el laminado será una opción menos invasiva y menos dolorosa que el microblading.
«No todas nos podemos hacer el laminado de cejas»
Este es otro mito. Solemos pensar que no todas podemos hacernos el laminado de cejas. Esta confusión surge porque no todas podemos hacernos microblading. Pero ya vemos que es solo un mito. ¡Puede realizarse en cualquier tipo de ceja! Y es la solución a los vellos desiguales, forma indefinida o crecimiento sin control.
No obstante, lo recomendamos especialmente para aquellas cejas rebeldes. Aquellas cejas onduladas que crecen en distintas direcciones. También para cejas con pequeñas calvas o con poco pelo. Además, si tienes el pelo de la ceja muy claro o fino, los productos del laminado le pueden ayudar. Aportan textura e intensidad a tus cejas. Además, el laminado le dará a tus cejas una apariencia más gruesa, peinada y ordenada a tu pelo. Así, conseguirá darle más volumen, relleno y flexibilidad al enmarque de nuestra mirada.
«El laminado de cejas es un procedimiento indoloro»
Esta es una realidad. ¡El laminado no duele! El tratamiento no requiere de pigmentación semipermanente. En cambio, depende de los productos que fijan el resultado. Además, es un tratamiento en el que se pueden aplicar tintes, se puede dar un mayor grosor y densidad a las cejas más finas. Es decir, es una gran alternativa para el tatuaje de cejas o el microblading. Estos dos tratamientos sí son dolorosos.
«Debo ser cuidadosa con mi laminado justo después de hacermelo»
Esta es una realidad. Los cuidados después del tratamiento son importantes para prolongar los resultados. En las primeras 48 horas tenemos que evitar mojar el área tratada. Eso significa que el gimnasio, la piscina y el sauna están prohibidos. Sin embargo, sí tienes que mantener las cejas hidratadas. ¿Por qué? Porque debes contrarrestar la sequedad en la zona que queda tras el tratamiento. Para ello, puedes aplicarte aceite facial. Existen muchos especialmente fabricados para nutrir nuestras cejas.
«El laminado de cejas no dura nada»
Este es un mito. El laminado de cejas busca diseñar el arco perfecto y lo fija durante 6 a 8 semanas. Para conseguir que estos resultados perduren, tendrás que cuidar y peinarte las cejas. Así como lo haces todos los días con tu cabello. El laminado te permitirá prescindir del gel fijador o el lápiz de cejas durante una larga temporada. ¡Un bonus a la hora de arreglarnos cada mañana!
«Tus cejas se quedarán oscuras para siempre»
Este es un mito. Aunque es cierto que las primeras 24 horas después del tratamiento, las cejas están un poco más oscuras de lo habitual. Pero tranquila, ¡no se quedará así para siempre! Este efecto es lo normal, ya que el pelo de la ceja queda peinado sobre la piel o zona donde antes no había densidad capilar. Sin embargo, después de este plazo de tiempo, tus cejas volverán a verse naturales.
Laminarte las cejas, ¿lo intentarás?
En Rebecana esperamos que este artículo te haya informado bien sobre el tratamiento. Y ahora que ya conoces sobre este procedimiento tan en tendencia, ¿estás lista para probarlo? Recuerda que Rebecana es Diseño de Miradas, así que libera tu belleza natural.